¡Pobre Campeche!
A Fuego Lento
Durante muchos años – desde antes de 1997 – Don Carlos Sansores Pérez tenía como proyecto político llevar a la gubernatura de Campeche a su hija Layda Sansores para hacer frente a las intolerancias y alardes de poder del entonces gobernador Salomón Azar García.
Muchas horas de pláticas y confidencias para lograrlo me compartió con un gran optimismo y confianza para revertir el desprecio a los propios paisanos, quienes sufrían estigmas por haber trabajado en su gobierno, haber sido sus amigos, no renegar de ello, convocando a líderes sociales de todo el Estado y crear el grupo “ Campechanos en Movimiento “ .
El crimen de Luis Donaldo Colosio trastocó lo evidente y la elección de la esperada candidatura del PRI para su hija , nunca llegaría, no por su posterior negativa calculada a votar por el incremento al IVA, sino por estar fuera del esquema político del apátrida Ernesto Zedillo .
En 1997 la elección no la perdió Layda ni la ganó Zedillo, sino fue robada al liderazgo de Carlos Sansores, quien nunca aprobaría los conflictos violentos Post electorales avivados por la dirigencia nacional del PRD, Muñoz Ledo, Romeo y los asesores foráneos de la candidata.
Las cosa cambiaron radicalmente, posterior al fallecimiento de Don Carlos y la traición de Ortega Bernés a su cofradía, para entregar a LSS la ubicación del “Centro de Espionaje”, cambió el rumbo de la historia política de Campeche para entrar al ámbito del chantaje por la información sensible ahí lograda .
En varias entregas con el título de” Campeche en Celofán” vaticinamos los escenarios a lo que hoy se vive en nuestra entidad .
Así como la primera vez en busca de la gubernatura sabíamos nunca se respetaría el voto, la similar certeza confirmó el triunfo de AMLO para que Layda lograra en su cuarta incursión y con todos los astros y castrados acomodaticios alineados, hacer historia y estar gobernando con histerias nunca imaginadas .
Los que acompañamos un proyecto de cambio para un país diferente y justicia republicana para Campeche, no pensamos nunca tener un gobierno de ocurrencias, montajes, odios, discriminar a los nativos, escarnio ni menos de absurdas vendettas .
No se ha cumplido las expectativas de equidad, creación de empleos, seguridad, probidad y trasparencia .
Estamos convertidos en el denigrante espectáculo nacional de ser simple plataforma electorera para la jefa de gobierno de la CDMX Claudia Sheinbaum y los montajes de linchamiento político sin pudor- cuál Circo Romano – en contra de Alejandro Moreno Cárdenas para saciar venganzas pueriles por no haber acatado las amenazas para aprobar la “Reforma Eléctrica” del presidente López Obrador.
Se termino el criterio de aliado para lograr La Guardia Nacional con el cabildeo de “AMLITO” para crear al villano sexenal de “MALITO”.
No se liberan pagos a proveedores de PEMEX en CARMEN y la economía del principal municipio petrolera del país es un caos de quiebras injustas
No existe proyecto de gobierno y los presupuestos federales y estatales se esfuman, desaparecen como pompas de jabón entre el jolgorio, arañazos de jaguar y fandangos distractores, mientras el festín de foráneos no tiene freno en su ejecución.
Las acciones de gobierno se valoran en la medida de cobrar facturas de odio contra molinos de viento poniendo todo el poder del Estado para crear temor y arrodillar dignidades .
¡Pobre Campeche!
Tan lejos de tener políticos y gobernantes con mística de servicio, capacidad y tan cerca de Yucatán un ejemplo de saber gobernar, crear progreso, ser tolerantes, amar a su terruño sin visión de tiranía, caciques y mezquindades.