AMLO defiende el papel de las Fuerzas Armadas en su sexenio y rechaza críticas sobre militarización
El presidente Andrés Manuel López Obrador defendió este martes el rol que desempeñaron las Fuerzas Armadas durante su administración, asegurando que se respetaron los derechos humanos y destacando su colaboración en seguridad, construcción y rescate. Afirmó que, a diferencia de sexenios anteriores, bajo su mandato no hubo desaparecidos, tortura ni masacres perpetradas por el Estado.
“Les agradezco que hayan cumplido la instrucción de respetar los derechos humanos. Me satisface mucho que en este gobierno no hubo desaparecidos, ni se torturó a nadie, no hubo masacres, no se reprimió a nuestro pueblo”, señaló durante su discurso, en el que hizo un balance de la relación de su gobierno con el Ejército y la Marina.
Reconocimiento a la labor de las Fuerzas Armadas
El mandatario resaltó la lealtad y compromiso de las Fuerzas Armadas no solo en tareas de seguridad pública, sino también en proyectos clave para su administración. López Obrador agradeció su participación en la construcción de grandes obras de infraestructura, como el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), y su colaboración en tareas de rescate durante desastres naturales.
“Lo que hicimos juntos en este sexenio, las misiones que se cumplieron tanto por la Secretaría de Marina, como por la Secretaría de la Defensa, fueron notorias. Ayudaron a garantizar la soberanía del país sin alarde, sin prepotencia”, señaló, subrayando la importancia de la colaboración militar en la defensa y desarrollo del territorio nacional.
Además, destacó la creación de la Guardia Nacional en 2019, que hoy cuenta con más de 130 mil elementos, y aseguró que cuenta con una aceptación del 75% de la población. Esta fuerza, adscrita a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), ha sido fundamental en la estrategia de seguridad de su gobierno.
Rechazo a las críticas sobre militarización
López Obrador desestimó las críticas que ha recibido a lo largo de su sexenio por el creciente papel de las Fuerzas Armadas en diversas áreas de gobierno, desde la seguridad pública hasta la gestión de aeropuertos y aduanas. “Se equivocan los que hablaron de que íbamos a militarizar al país”, sostuvo, argumentando que quienes hacen tales señalamientos desconocen la historia de México y de sus Fuerzas Armadas.
El presidente hizo énfasis en que el Ejército y la Marina de México se distinguen de otras instituciones militares en el mundo porque sus miembros provienen del pueblo y no forman parte de las élites económicas o políticas del país. “Nadie se ha enriquecido o formado parte de la oligarquía de nuestro país”, añadió.
Señalamientos de la oposición y organizaciones de derechos humanos
A lo largo de su administración, López Obrador ha enfrentado cuestionamientos por el creciente peso de las Fuerzas Armadas. La oposición ha criticado la intención de trasladar la Guardia Nacional a la Sedena, mientras diversas organizaciones de derechos humanos, como Amnistía Internacional, han expresado su preocupación por el poder militar en México.
Estas organizaciones han advertido sobre el riesgo que implica la creciente participación militar en áreas tradicionalmente civiles, como la administración de obras de infraestructura y empresas estatales. A pesar de estas críticas, López Obrador ha defendido firmemente su decisión, argumentando que el involucramiento de las Fuerzas Armadas ha sido esencial para garantizar la seguridad y soberanía del país.
Finalmente, el presidente López Obrador cerró su discurso exaltando el papel histórico de las Fuerzas Armadas en México, afirmando que su gobierno ha avanzado en la construcción de la paz y la seguridad gracias a la reforma constitucional que permite la participación militar en estas tareas. Con un enfoque en la soberanía nacional y el respeto a los derechos humanos, defendió el legado de su administración en un contexto de crecientes desafíos en materia de seguridad y críticas sobre el papel del Ejército en la vida pública.