Abuelito transfiere más de 1MDP a cuenta equivocada
Residente de Australia, un abuelito transfiere más de 1MDP a cuenta equivocada y su dinero termina en manos equivocadas. Ahora el sujeto se niega a devolvérselo.
Gordon Layton, es un adulto mayor de 88 años de edad que, al igual que muchos ancianitos lidian para usar las herramientas electrónicas como la aplicación de la banca móvil.
El pasado 14 de junio, Layton debía pagar 71 mil dólares australianos, o sea un poco más de 1 millón de pesos, a una empresa por hacer una maniobra en su propiedad, ubicada en Bundaberg, Australia.
Sin embargo, el señor Layton puso un número erróneo en la solicitud de transferencia y su dinero fue depositado a la cuenta de una persona desconocida. La hija del ancianito, Jacqui Morrison-White, expresa indignadamente:
“Es una sensación repugnante cuando te das cuenta de que $71,400 del dinero de tu padre se ha esfumado. Mi padre había guardado una cuenta bancaria con el número equivocado y le pagó a esa persona.”
La familia del abuelito se percata del error a las pocas horas y se contactan con el banco para revertir la operación.
El depósito se hizo en la cuenta de otro banco, así que se hicieron las llamadas pertinentes. No pasó mucho tiempo para que el destinatario sea ubicado.
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Abuelito transfiere más de 1MDP a cuenta equivocada y se niegan a devolvérselo
Era un malentendido que se habría arreglado de inmediato pero el problema es que el sujeto que recibió la fuerte cantidad decide retirar todo el dinero de la cuenta; sin intención de devolverlo. Layton narra:
“Bueno, obviamente no estaba contento. De hecho, estaba realmente enojado de que este tipo haya aprovechado la oportunidad para decir: “pues no lo devolveré”, maldita sea.”
El banco del destinatario está colaborando con la policía para que esta persona sea detenida por robo. Mientras tanto, el anciano tiene que lidiar con las consecuencias de su error; la empresa al no percibir el pago a tiempo lo amenaza con interponer una demanda.
Asimismo, el abuelito debe alojarse en casa de su hija porque ya no tiene dinero para cumplir con el pago de los servicios en su propiedad.
Debido a la situación el señor Layton ha sufrido un infarto. De no recuperar el dinero, el ancianito deberá vender su casa para pagar la deuda.
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