Mónica, ¿líder del Senado?
Sin Remitente
Con la senadora Mónica Fernández Balboa como líder de la Junta de Coordinación Política del Senado, el presidente Andrés Manuel López Obrador tendría una aliada que ya le demostró lealtad y compromiso en cada una de las iniciativas que ha enviado y han sido aprobadas, o bien dando la lucha desde el pleno a favor del pueblo.
En el senado, Mónica Fernández Balboa, en su calidad de presidenta de la Comisión de Gobernación, ha sido lo que su paisano Manuel Rodríguez González desde la titularidad de la Comisión de Energía de la Cámara de Diputados y como aspirante al gobierno de Tabasco: un defensor de la Cuarta Transformación que lidera el presidente y de la defensa a ultranza de la soberanía.
La tabasqueña cuenta con la experiencia y el liderazgo en la Cámara Alta para atender los temas pendientes y sacar avante el último tramo de la responsabilidad que dejará su compañero senador Ricardo Monreal, que pedirá licencia para participar en el proceso interno de Morena para la selección de su candidato a la presidencia que este domingo dejó clara las reglas.
No es fortuito entonces que su nombre aparezca ya entre los principales a suceder a Ricardo Monreal apenas deje el cargo en el que fue ciertamente protagonista de varios desaguisados que lo llevaron incluso a enfrentarse con el presidente de la República.
La cercanía y confianza que la senadora ha mantenido con el presidente, no solo por el paisanaje sino porque son amigos y compañeros de lucha y fundadores de Morena, garantizarían una mayor unidad y cohesión al interior de la bancada de los senadores de Morena y una nueva relación de diálogo con el resto de los miembros del Senado.
Para el presidente es por demás importante que el nuevo líder del Senado esté presto para dar la batalla y defender las próximas iniciativas que son fundamentales, como las reformas constitucionales al Poder Judicial, para la consolidación de la Cuarta Transformación. Y en ese propósito, la senadora Mónica Fernández Balboa sería la más indicada por una sola razón: su lealtad a prueba de todo.