Con control sanitarios las reses y cerdos que se sacrifican en el rastro carmelita
Por: Fernando Kantún
Cd. Carmen, Camp.-Con la finalidad de evitar el ingreso de reses y cerdos al rastro municipal de Ciudad del Carmen, provenientes del abigeato; en el matadero se lleva un estricto control de los animales mediante las guías de adquisición, así también del certificado fistosanitario,
requisitos que piden la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER) a través del Servicio Nacional de Sanidad Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (SENASICA),
mencionó Romeo Reyes Hernández, secretario general del Sindicato de Matarifes afiliado a la Confederación de Trabajadores de México (CTM) a nivel local.
Añadió que en el rastro municipal de la Isla se sacrifica a la semana entre 150 a 180 reses; y entre 200 a 220 cerdos para la comercialización de la carne en los mercados locales al público consumidor.
Expresó que el ganado que ingresa al rastro proveniente de Palizada, debe portar los aretes, guías de adquisición (compra) para ser sacrificados, sin esos requisitos los animales no son aceptados, porque podrían ser producto de abigeato.
Señaló que antas que se sacrifique el animal en el matadero, tiene que pasar a una revisión del fiscal sanitario que se encuentra en el rastro municipal, así como a la revisión médica para verificar que el ganado se encuentre libre de algunas enfermedades que pueda afectar la salud de los consumidores.
Recordó que hace cinco años, el tema de abigeato preocupaba al sector ganadero porque de forma contante se daban esas incidencias en la región del municipio de Carmen y Palizada,
e incluso en el rastro municipal para esa temporada robaron tres cerdos, los delincuentes ingresaron por el perímetro que carece de barda (costado que colinda con la colonia Pedro Sáenz de Baranda) y se llevaron los animales.
Manifestó que actualmente hay vigilancia en los alrededores del rastro para evitar el robo de los animales que se encuentran en las corraletas. Y en cuanto abigeato que se da en algunas regiones como Palizada y zona de los Ríos,
se inspecciona o vigila a que todos los animales que ingresan al rastro cuenten la guía correspondiente del lugar donde fue adquirido y quién vende, para evitar que sean sacrificados reses de dudosa procedencia.
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