El mito de la Ley Nahle
Triques
La fantasía de algunos medios y periodistas es cosa de todos los días. Su manera de ver la realidad política del país es digna de los delirios febriles más extremos y una de esas expresiones radica en lo que esos comunicadores llamaron la “Ley Nahle”, en el paroxismo de su parcialidad.
El artículo11 de la Constitución del Estado de Veracruz siempre ha permitido que los hijos de padres veracruzanos sean considerados veracruzanos con todos sus derechos. La adicción realizada a principios de agosto es un mero formalismo que, en el fondo no cambia ningún derecho que no haya sido otorgado desde hace años a los hijos de veracruzanos nacidos en otra entidad.
Artículo 11. Son veracruzanos: I. Los nacidos en el territorio del Estado.
II. Los hijos de padre o madre nativos del Estado, nacidos en el territorio nacional o en el extranjero.
Y se le adicionó. “Las o los mexicanos nacidos fuera del territorio del estado, con hijos veracruzanos o con una residencia efectiva de cinco años en territorio veracruzano”.
Es decir, la Ley Nahle no tenía como objetico favorecer la candidatura de la actual secretaria de Energía sino obstaculizarla.
Sin embargo, la interpretación de algunos medios y periodistas, principalmente de Veracruz, interpretaron a su manera, con más mala intención que ignorancia. Y esto terminó por contagiar a la imberbe oposición, que, al interpretar, la interpretación, anunció que presentarían una acción de inconstitucionalidad contra esta reforma y agregó: “Esto, lo que hicieron, está claramente para beneficiar a Rocío Nahle, que no es veracruzana, porque la Constitución de Veracruz dice que para poder ser candidato a gobernador tienes que ser veracruzano de nacimiento”, lo cual habla del desconocimiento de la ley de la entidad.
Ya que de los siete requisitos plasmados en el artículo 43, ninguno habla de ser nacido en la entidad como asegura el remedo de líder del PAN.
Los medios, principalmente en Veracruz, se dieron vuelo montados sobre una fantasía que coincidía con su rencor contra el gobierno estatal, por su negativa a darles las dádivas que gobiernos anteriores les otorgaban sistemáticamente y que consideraron parte vitalicia de sus ingresos.
Solía aparecer con disparates como éste: “La mayoría de los diputados en el Congreso local votaron la denominada ‘Ley Nahle’, que reforma el artículo 11 de la Constitución de Veracruz para adicionar un párrafo que permite que los mexicanos nacidos fuera del territorio estatal, con hijos veracruzanos o con una residencia efectiva de cinco años en la entidad, puedan ser considerados veracruzanos”.
Es entonces cuando les dan voz y espacios mediáticos a la oposición sobre el tema, afirmando que se trataba de una ley hecha a modo en favor de Rocío Nahle, cuando en realidad ella nunca tuvo impedimento para ser gobernadora porque su padre nació en Veracruz, y el artículo 11 otorga todos los derechos de un veracruzano a los hijos de las personas nacidas en territorio del estado desde hace muchos años.
Los medios se volcaron a decir que hubo una sesión extraordinaria virtual exprés, que fue convocada dos horas antes, sólo se trató este punto de reforma presentada por la legisladora Magaly Armenta Oliveros, de Morena, el 28 de julio pasado.
En realidad, se trató de una sesión ociosa, un distractor para que la oposición se desgastara y se mostrara su división y decadencia. Así, los medios en un nado sincronizado los medios señalaron que la reforma fue aceptada en unos minutos con 38 votos a favor, 11 en contra y cero abstenciones.
La votación, aseguran, fue apoyada por los legisladores panistas Othón Hernández Candanedo, Hugo González Saavedra y Nora Jessica Lagunes; además del petista Ramón Díaz Ávila; de los diputados del Partido Verde José Luis Tehuintle, Tania Cruz Mejía y Citlalli Medellín Careaga; así como por Juan Enríquez, de Fuerza por México.
La oposición y algunos medios veracruzanos carecen de memoria. En 1991, el ahora militante del limbo partidista, Porfirio Muñoz Ledo, quien naciera en la Ciudad de México, en 1933, fue candidato del PRD a la gubernatura de Guanajuato. Por “derecho de sangre”, que en otras palabras es exactamente lo mismo que dicta el artículo 11 de la Constitución de Veracruz.
Los panistas fueron quienes más airadamente protestaron por algo que consideran ilegal, cuando en realidad ellos, con o sin autorización tiene a varios gobernadores en lugares donde no nacieron, por ejemplo, Mauricio Kuri, nació en Orizaba, Veracruz y gobierna Querétaro; Mauricio Vila, nació en la Ciudad de México y gobierna Yucatán; Francisco García Cabeza de Vaca, nació en McAllen, Texas y desgobierna Tamaulipas; Martín Orozco, nació en Jalisco y gobierna Aguascalientes; Javier Corral, nació en El Paso, Texas y gobernó Chihuahua; Teresa Jiménez, nació en el Edomex, y gobernará Aguascalientes, entre otros.
La Ley Nahle, no sólo es un mito sino una finta que algunos ingenuos intentaron convertir en descontento político.
